Diego Armando Maradona, campeón con la selección argentina en el Mundial de futbol de 1986, murió este miércoles a los 60 años tras sufrir un paro cardíaco en su casa de Buenos Aires.
El astro protagonizó algunas de las principales hazañas del fútbol argentino y buena parte de sus escándalos también, lo que parece que continuará tras su muerte, pues su fortuna está en disputa.
Según estimaciones de diversos sitios especializados, la fortuna del exfutbolista y también director técnico ronda los 100,000 dólares.
Hace un año, Maradona anunció que “estoy más vivo que nunca” y decidió no dejar herencia a sus cinco hijos: Dalma, Diego Sinagra, Giannina, Jana y Diego Fernando. Por lo que sería donada, pero sin dar más detalles.
"No me estoy muriendo para nada. Duermo plácidamente porque estoy trabajando (…) Yo sé que ahora, cuando uno se va haciendo más viejo, se preocupan más por lo que dejas que por lo que estás haciendo. Lo único que les digo a todos es que no les voy a dejar nada", dijo Maradona en un video publicado el 4 de noviembre de 2019.
Sin embargo puede haber conflictos, pues por ley los familiares directos deben recibir parte de la herencia.
Con una larga trayectoria en la industria del futbol, Maradona logró beneficios monetarios relevantes, pero un mal manejo de sus recursos, particularmente en el tema de impuestos, afectó su patrimonio.
En 2018 fue nombrado presidente del del Dínamo Brest, de Bielorrusia, donde le regalaron un anillo de brillantes valuado en 300,000 euros y una camioneta Overcomer Hunta, cuyo diseño está inspirado en vehículos de guerra.
Mientras trabajó en Dubai, como director técnico de Fujairah FC se hizo de dos vehículos de lujo: un Rolls Royce (LON:RR) Ghost, valuado en 300,000 euros, y un BMW (DE:BMWG) i8, tasado en 145,000, de acuerdo con Infobae.
El argentino tenía contratos con Konami (por el videojuego PES), escuelas de futbol que llevan su nombre en China, inversiones en Cuba, entre ellas un hotel, y en Italia.
Con ideología izquierdista Maradona no ocultaba su postura en temas políticos y fue muy apegado a la izquierda. En su país recientemente apoyó al ahora presidente Alberto Fernández.
“Los estábamos esperando. Vamos Argentina”, escribió Maradona cuando Fernández fue declarado ganador.
También sostuvo reuniones con el expresidente de Bolivia, Evo Morales, y lamentó el golpe de estado en su contra.
“Lamento el golpe de estado orquestado en Bolivia. Sobre todo por el pueblo boliviano, y por Evo Morales, una buena persona que trabajó siempre por los más humildes”, dijo Maradona.
Además, fue muy apegado al movimiento de Nicolás Maduro en Venezuela e incluso asistió a mítines políticos.
"El imperialismo no va a poder con Venezuela. Estos países que apoyan el bloqueo económico de Estados Unidos, dan vergüenza. Están dejando morir a grandes y chicos por falta de medicamentos y de alimentos. Fuerza venezolanos, fuerza Nicolás Maduro", posteó el exfutbolista en mayo de 2019.
El inicio de todo Maradona es el quinto de los hijos que tuvo el matrimonio del albañil Diego Maradona y la ama de casa Dalma Salvadora Franco. El “Pelusa”, nació el 30 de octubre de 1960 en Villa Fiorito, un asentamiento de bajos recursos en el sur del área metropolitana de Buenos Aires.
A los 10 años, mientras jugaba a la pelota en un polvoriento potrero de su barrio, fue descubierto por el reclutador Francisco Cornejo del club Argentinos Juniors. Cinco años después, en 1976, estaba debutando en la primera división del equipo, cuyo estadio ahora lleva su nombre.
La explosión de Diego en Argentinos Juniors provocó su fichaje en Boca Juniors en 1981. De ahí en más, la carrera del joven futbolista solo fue creciendo hasta tocar la gloria.
Un año después debutó en el futbol europeo en el Barcelona, pasando en 1984 al Napoli de Italia, equipo al que le dio las principales hojas de su historia y por las que fue nombrado como “jugador histórico” del club.
Maradona también llevó a la selección argentina a lo más alto. Fue el capitán del último equipo albiceleste que levantó una Copa del Mundo, en México 1986.
Tras el conflicto armado de 1982 entre Argentina e Inglaterra por las Islas Malvinas -las cuales continúan bajo dominio británico-, el partido entre ambos países estuvo cargado de simbolismos y una tensión que excedían al encuentro deportivo.
A los 5 minutos del segundo tiempo, luego de un rechazo defectuoso de un defensor inglés, Maradona y el arquero británico Peter Shilton disputaron en el aire un balón, el cual el capitán argentino golpeó con su puño izquierdo para que entrara en la valla de Inglaterra.
“Lo juro por lo que más quieras, salté junto a Shilton pero le di con la cabeza”, dijo el “10” tras el partido en el estadio Azteca.
Lo hice con la cabeza de Maradona, pero con la mano de Dios
agregó, acuñando la expresión con la que el famoso gol sería recordado.
Años más tarde, Maradona reconoció que el gol fue con la mano.
El segundo gol argentino en ese partido se produjo pocos minutos después de la apertura del marcador. Maradona recibió el balón en propio campo argentino y tras eludir a cuatro rivales, superó a Shilton en el área inglesa para marcar lo que, de acuerdo a una votación organizada por la FIFA, fue “el gol del siglo” XX.
Con información de Reuters
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