por Kenia Arteaga
Infosel, mayo. 9.- El gobierno de México declaró desierto el concurso de licitación para construir la refinería de la empresa estatal Petróleos Mexicanos en el puerto de Dos Bocas, Tabasco, por lo que determinó que ahora será construida por la Secretaría de Energía y por Pemex.
La administración del presidente Andrés Manuel López Obrador determinó no otorgar el contrato porque ninguna de las cuatro empresas que fueron invitadas a la licitación pudo comprometerse a realizar la obra en tres años y con un costo inferior a los ocho mil millones de dólares que el gobierno quiere gastar.
Esas empresas fueron el consorcio formado por la estadounidense Bechtel y la ítalo-argentina Technit; el consorcio formado por la australiana WorleyParsons y la estadounidense Jacobs; la firma de origen francés Technip (PA:FTI) y la empresa estadounidense KBR, que habían sido invitadas por el gobierno por considerar que eran las mejores compañías del mundo para realizar este proyecto.
A pesar de la negativa de las empresas a aceptar los términos del contrato, México optó por seguir adelante con la obra porque tiene la intención que el país sea autosuficiente en los producción de energéticos.
"Ya teníamos nosotros un plan B, no fue anoche que se decide, es una obra muy importante, tenemos que lograr la autosuficiencia en la producción de energéticos, en particular en gasolinas y en diésel", dijo el mandatario, en su conferencia de prensa matutina. "Lo propuse desde hace mucho tiempo, es una contradicción, es un absurdo, que tengamos petróleo crudo, que tengamos materia prima y estemos comprando gasolinas".