(Por Federico Tessore)
Desconfíe siempre de los discursos de los principales organismos mundiales, que no sólo no están buscando tu beneficio económico, sino que además intentan hacerte pagar la fiesta.
No nos engañemos, la mayoría de los altos organismos financieros están compuestos por políticos, que lejos de hacer lo necesario, realizan lo que pide el pueblo o –en ocasiones- lo que le conviene al grupo de poder dominante.
Por esa razón, quienes intenten predecir nuevos aumentos del tipo de interés norteamericano, entraran en un juego macabro.
De nada sirven los argumentos numéricos. El que diga voy a apostar por esta subida de tipos porque es lo que "debería suceder" está pecando de inocente y hasta me produce ternura…
A finales del año pasado la mayoría de los analistas vaticinaban una nueva subida de tipos y un consecuente desplome del oro.
Mi postura fue totalmente opuesta, y tiempo después me enteré que coincidió con el análisis de dos viejos zorros de los mercados: George Soros y Paul Singer.
Ellos, al igual que yo, no creyeron las tradicionales minutas de la Fed, en las cuales se auguraban, mes a mes, incluso ya desde 2015, que habría una etapa inminente de alzas de tipos, casi ininterrumpida.
Entendieron, como yo lo hice, que detrás de las decisiones económico-financieras, desgraciadamente, están los políticos…
Desconfía de las autoridades
Empezó el año, y mes a mes las promesas de que la Fed elevaría los tipos y golpearía a las materias primas en el primer semestre del año se fueron diluyendo.
El oro, que si se cumplía la palabra de la Fed iba a acabar muy afectado, terminó siendo una gran inversión. Observa el siguiente gráfico:
Fuente: Goldprice.org
Soros y Singer desconfiaron de Yanet Yellen y del board de la Fed, por lo que hicieron todo lo contrario: empezaron a acumular posiciones en inversiones vinculadas al oro. Algo sospechaban sin lugar a duda estos especialistas en detectar oportunidades.
En mayo, la noticia fue oficial: se conoció que Soros había vendido en el primer trimestre fuertes tenencias accionarias en EEUU, por nada menos que 265 millones de dólares, para destinarlos a la minera Barrick Gold (NYSE:ABX).
Además, reveló que contaba con opciones de compra sobre 1,05 millones de acciones del ETF SPDR Gold Trust.
¡Si eso no fue jugarse un pleno, qué lo es!
El precio del oro subió 16% en los primeros tres meses del año. ¡Fue su mayor alza en 30 años para un primer trimestre!
Y mira cómo le ha ido a Soros con Barrick Gold en el semestre:
Fuente: Yahoo (NASDAQ:YHOO) Finance
Impactante. La acción de la minera se ha disparado nada menos que 168%.
¡Chapeau Míster Soros!
Un buitre con garras afiladas
Similar estrategia adoptó Paul Singer, titular del famoso y particular fondo NML, quien acababa de salirse con la suya en el juicio del siglo contra Argentina.
Recomendó mantener entre 5% y 10% de la cartera en oro.
Argumentó por entonces que el deseado metal serviría para protegerse de los tipos de interés cero o negativos y manifestó que veía un panorama escéptico respecto de la recuperación económica global, dado que temía otra recesión por carencias en los gobiernos.
Fiel a su estilo combativo, lanzó sin rodeos durante una conferencia en Tel Aviv: "Los países centrales son irremediable y totalmente insolventes".
Singer opinó que los precios de acciones y bonos se "distorsionaron" por la política monetaria de los bancos centrales y que el dinero se desvaloriza en términos reales por la inflación.
"Cuando miro los activos para invertir, uno tratado injustamente es el oro". Y sentenció entonces: "Es el único dinero real". No se equivocaba en su análisis.
Mi opinión
Sin duda, el oro demostró una vez más ser el activo refugio predilecto.
El Brexit ha generado incertidumbre adicional y ha dado el golpe de gracia para que el metal precioso fuera una de las inversiones estrella en lo que va de año.
Soros y Singer sin duda se han salido otra vez con la suya y de qué manera. Grandiosa.
Pero lo importante no es eso...
La lección aquí es que una vez más las promesas o proyecciones de los principales dirigentes de la política monetaria mundial no se han cumplido.
¿Ha sido sólo un error de cálculo? ¿No habrán querido engañar una vez más a la masa de inversores con una distorsión de la realidad para que muchos paguen el coste de la fiesta del dinero gratis?
Ya lo sabes, no creas todo lo que dicen y menos aún si son políticos que buscan o tienen la posibilidad de influir en el comportamiento del mercado.
¡Que tengas un gran fin de semana!