El simposio anual de la Reserva Federal en Jackson Hole es el evento más importante de la semana. En los últimos meses, la Reserva Federal ha insinuado la necesidad de reducir las compras de activos, y ese momento ha llegado.
Los bancos centrales de Canadá, el Reino Unido y Nueva Zelanda ya han sentado las bases para la reducción de las compras, por lo que sería natural que la Reserva Federal siguiera su ejemplo. El simposio de Jackson Hole sería el lugar perfecto para que el banco central prepare al mercado para la reducción de activos, pero la pregunta es: ¿Lo hará?
A la vista de la ola de ventas del dólar, de los nuevos máximos del S&P 500 y del descenso de los rendimientos de los bonos del Tesoro a 10 años del lunes, los inversionistas parecen escépticos. En las últimas 24 horas, hemos visto informes sobre el deterioro de la actividad del sector manufacturero y de servicios en todos los rincones del mundo, incluidos Australia, el Reino Unido, la Eurozona y EE.UU.
La variante Delta está suponiendo un riesgo para la recuperación mundial y algunos inversionistas creen que la Fed podría esperar hasta septiembre para dar la señal de reducción.
En unas semanas más habrá más información sobre el impacto económico de la variante Delta y los recientes cambios en las tendencias de la inflación (los precios del petróleo y la madera han bajado mucho). También hay un informe más sobre el empleo antes de la reunión de septiembre del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC).
Con dos reuniones de política monetaria después de septiembre (en noviembre y diciembre), si la Fed quisiera actuar con cautela, podría esperar unas semanas más antes de dar una orientación clara sobre cuándo empezará a reducir las compras de activos.
La divisa que mejor se comportó hoy fue el dólar canadiense. Tras siete días consecutivos de caídas, los precios del crudo repuntaron con fuerza, subiendo más de un 6% intradía. La búsqueda de gangas y el debilitamiento del dólar estadounidense pueden haber contribuido a la recuperación, pero en última instancia el crudo cayó demasiado rápido, y cuando eso ocurre, es muy probable que se produzca un repunte de alivio.
Los fundamentos canadienses son sólidos, con un banco central que ha anunciado formalmente su plan de reducir las compras de bonos, una inflación en alza y una población recién vacunada (más 75% de los adultos con derecho a ello han recibido al menos una vacuna).
El euro y la libra esterlina también cotizaron al alza, a pesar de los resultados mixtos de los PMI. En la zona euro, la actividad del sector manufacturero y de servicios se ralentizó, lo que hizo que el índice de gerentes de compras (PMI) compuesto bajara de 60.2 a 59.5.
Aunque este deterioro fue ligeramente superior al previsto, sólo representó una pequeña caída desde el máximo de dos décadas alcanzado en julio. En el Reino Unido, la actividad manufacturera se aceleró, pero la actividad del sector servicios se desaceleró.
La eliminación de las restricciones del COVID-19 debería haber impulsado la actividad económica, pero los problemas de la cadena de suministro y de personal hicieron que el índice compuesto del PMI cayera por tercer mes consecutivo hasta un mínimo de seis meses. Nada de esto impidió que el euro y la libra esterlina subieran porque el apetito de riesgo era fuerte.
El dólar australiano y el neozelandés se dispararon a pesar de los encierros persistentes. La primera ministra neozelandesa, Jacinda Arden, dijo que el cierre del país se prolongará, como mínimo, hasta el viernes y, en concreto, hasta finales de mes en Auckland.
El primer ministro australiano, Scott Morrison (LON:MRW), animó al país a vacunarse, afirmando que los encierros podrían ser "cosa del pasado" una vez que el 80% de la población adulta esté vacunada. Sin embargo, con sólo el 24% de la población inmunizada, queda un largo camino por recorrer.
El NZD/USD estará en el punto de mira esta noche, ya que se publicarán las ventas minoristas de Nueva Zelanda. El segundo trimestre fue fuerte para Nueva Zelanda y el último informe sobre el gasto de los consumidores debería reflejarlo.