En nuestro reporte semanal que entregamos el pasado 20 de noviembre, publicamos un artículo sobre los “Ciclos de los mercados”, donde comentábamos que en México nos encontrábamos en la etapa del pesimismo, sin embargo, la caída que presentó la Bolsa este lunes nos podría llevar a la siguiente etapa, que es la del pánico.
Este lunes, muchos inversionistas decidieron salir a vender sus acciones al precio que les pagaran, provocando que el principal índice de la Bolsa (S&P/BMV IPC) registrara una pérdida de 4.17%, después de acumular ocho semanas consecutivas de pérdidas, cayendo este índice a 39,427 puntos al cierre del lunes, con un volumen de 287.1 millones de acciones del IPC y de 408 millones de todo el mercado accionario local.
La caída estuvo encabezada por las acciones de Gfnorte O con -12.95% y Livepol C-1 con una pérdida de 10.24%, demostrando que la gente vende sin importar los fundamentales de las empresas ni las señales de los indicadores técnicos.
La pregunta es ¿cúanto tiempo más durará esta caída?. Desafortunadamente si no se logra recuperar la confianza una vez que tome posesión el actual presidente electo, la Bolsa podría llegar a la etapa de la devastación, donde las pérdidas son elevadas y solo compran los inversionistas institucionales y una que otra persona física.
En Estados Unidos, también hay incertidumbre, pero no se compara con la de México, y prueba de ello es que el lunes, los tres principales índices de Wall Street cerraron con una ganancia promedio de 1.69%, ante la esperanza de que se logre un acuerdo el fin de semana, entre el presidente Donald Trump y el presidente de China.
En el mercado de divisas, el dólar empezó la semana con una ligera ganancia de 0.13% frente a la canasta de seis monedas, ubicándose el índice DXY en 97.06 puntos, mientras que el tipo de cambio alcanzó al cierre los $20.63 (spot venta) según Banxico, lo que representó una pérdida de 1.15%, con respecto al cierre del viernes.