Existe el argumento de que "la industria petrolera va a prosperar en las próximas décadas", ya que la tecnología reduce drásticamente los costes de producción. Además, las dos posibles vacunas COVID-19, la de Pfizer (NYSE:PFE) y la de Moderna (MX:MRNA), con una eficacia de al menos un 90% en las últimas etapas de sus ensayos, arrojan algo de luz al final del túnel.
Sin embargo, en este momento, los casos de coronavirus de Estados Unidos siguen superando los 100,000 al día, y en algunas zonas del país están aumentando las restricciones sociales, lo que significa, una vez más, menos demanda de petróleo.
Como resultado, el petróleo parece haber encontrado cierta resistencia, y no han podido extender el repunte de ayer, lo que sugiere que hay más vendedores que compradores a pesar de todas las recientes buenas noticias en el frente de la vacuna.
El petróleo ha oscilado arriba y abajo y ha vuelto a su precio de apertura, lo que demuestra indecisión, ya que los traders podrían sentirse perdidos con respecto a qué titulares atender: la propagación descontrolada del coronavirus y el aumento de las restricciones sociales o el progreso potencial de las vacunas de Pfizer y Moderna.
El miércoles, el precio desarrolló una estrella fugaz particularmente aciaga (la sombra superior extralarga se cierne sobre los alcistas). La presunta dinámica del patrón es que los máximos intradía atraen a los alcistas, mientras que el cierre tremendamente a la baja los obligó a abandonar posiciones, reduciendo la oferta. El gran descenso ha atraído a los especuladores a posicionarse en corto en el precio, lo que ha provocado una profecía autocumplida.
Hay que tener en cuenta que el precio está luchando precisamente en los máximos de septiembre-octubre que se encuentran en la misma área en la que estaría la parte superior de un canal descendente. El RSI está volviendo a probar una tendencia bajista desde el comienzo de una cuña ascendente desde mediados de mayo. La cuña presenta un sesgo bajista tras el movimiento climático que la precedía.
La idea es que los traders se apuntaron con la esperanza de que fuera más de lo mismo, pero que cuando el avance perdiera impulso los alcistas decepcionados abandonarían sus posiciones. Eso provocó un repunte a la baja, confirmando su naturaleza bajista, y señalando una trayectoria descendente. El RSI proporcionó una ventaja a los traders observadores cuando, desde principios de junio hasta el repunte a la baja del 1 de septiembre de la cuña, el indicador descendió incluso cuando los precios impulsaban los precios.
Una nota de precaución: mientras que la venta de tres días del miércoles al viernes demuestra que los vendedores están al mando en estos niveles de precios, la naturaleza bajista del movimiento se ve agravada pues los precios de que el precio alcance los máximos de septiembre a octubre, en la parte superior del canal descendente, tras una cuña bajista. Esto podría ser la configuración de una bandera descendente, alcista tras la brusca subida de dos días anterior.
El RSI también podría disponerse a tocar fondo, si deja atrás el nivel 60 y su línea de tendencia bajista. Por lo tanto, configure su operación con cautela, con un plan elaborado de antemano y cuidadosamente trazado al que pueda ceñirse, que le permita navegar las potencialmente peligrosas aguas del mercado.
Estrategias de trading – Configuración de posición corta
Los traders conservadores esperarán posicionados en corto hasta que la bandera se esfume, y luego hasta volver a probar el nivel de 40 dólares para confirmar la distribución.
Los traders moderados, probablemente esperarán también a que la bandera desaparezca y se dé un movimiento de retorno para una mejor opción de entrada en corto, si no hasta la confirmación.
Los traders agresivos podrían arriesgarse a posicionarse en corto ya, colocando una orden de minimización de pérdidas cerca en caso de que el precio complete una bandera alcista. Aquí tenemos un ejemplo:
Ejemplo de operación:
Entrada: 41.50 dólares
Orden de minimización de pérdidas: 42.50 dólares
Riesgo: 1 dólar
Objetivo: 36.50 dólares
Recompensa: 5 dólares
Relación riesgo-recompensa: 1:5
Nota del autor: Esto es sólo un ejemplo. Es una de las muchas maneras de abordar la misma operación, dependiendo de su estilo. Debe considerar su tiempo, presupuesto y temperamento. Si no sabe cómo hacerlo, practique con pequeñas operaciones, sin más intención que el aprendizaje. El trading no es fácil. No espere hacerse rico, y menos rápidamente.