- Moody’s (N:MCO) bajó la calificación de Brasil en dos peldaños, ubicándola en grado especulativo al igual que S&P y Fitch
- La agencia ubicó la perspectiva de la deuda en negativa
- Esperan un deterioro adicional en el perfil de la deuda de Brasil en un entorno de bajo crecimiento económico y destacaron la desafiante dinámica política
- No descartamos bajas adicionales en la calificación por parte de alguna de las agencias en los próximos meses
Moody’s quitó el grado de inversión a Brasil. La agencia bajó la calificación de la deuda soberana de Brasil en dos escalones de Baa3 a Ba2, ubicándola en grado especulativo y cambió la perspectiva a negativa. Esto último refleja la perspectiva de que los riesgos se inclinan a una consolidación y recuperación todavía más lenta o al surgimiento de nuevos choques, creando incertidumbre sobre la magnitud del deterioro del perfil de deuda de Brasil. Cabe destacar que Moody’s quitó el grado de inversión a Brasil después de que S&P lo hiciera en septiembre del año pasado, para volver a bajar la calificación la semana pasada. Mientras que Fitch ubicó en diciembre del año pasado la calificación de Brasil en grado especulativo
De acuerdo con Moody’s, las razones de la baja en la calificación son:
(1) La perspectiva de un deterioro adicional en el perfil de la deuda de Brasil en un entorno de bajo crecimiento, con la deuda del gobierno excediendo muy probablemente el 80% del PIB en tres años. Esperan que para el periodo comprendido entre 2016 y 2018, el PIB decrezca a una tasa promedio de 0.5% y anticipan que las tasas de interés permanezcan elevadas en términos reales;
(2) la desafiante dinámica política que continuará complicando los esfuerzos de consolidación fiscal por parte de las autoridades y retrasará las reformas estructurales.
No descartamos una baja adicional de la calificación por parte de alguna de las agencias en los próximos meses. Las tres agencias calificadoras S&P, Moody’s y Fitch ubican la perspectiva de la deuda soberana de Brasil en negativa, dejando con esto abierta la puerta a futuras bajas. Fitch ubica la calificación sólo un nivel abajo del grado de inversión, mientras que Moody’s y S&P la tienen dos grados abajo. No descartamos bajas adicionales en la calificación en los próximos meses.