Sobre caro y barato en los mercados financieros

 | 25.10.2018 08:30

Caro y barato en los mercados es relativo. Créanme cuando les digo que caro siempre puede hacerse más caro y barato puede convertirse en más barato, una ganga, una quiebra.

En innumerables oportunidades hemos visto compañías supuestamente sólidas bajar, bajar y bajar hasta llegar a la quiebra y otras que no dejan de subir sorprendiendo hasta al más incrédulo. Sin embargo, hemos aprendido desde la infancia que la forma correcta para ganar dinero en las inversiones es comprar barato y vender caro. Es por esto que cuando nos enfrentamos a los mercados nos sentimos cómodos buscando cosas que han caído mucho en precio o se encuentran a la baja y esperamos el giro mágico que nos genere la rentabilidad. En contraste, siempre evadimos los activos que han subido mucho en precio porque los consideramos caros, sobrevalorados y se encuentran muy cerca de la parte superior derecha de nuestro gráfico.

Les coloco un ejemplo para dejar más clara la idea. La compañía X cotizaba en el entorno de los 40 dólares luego de romper un máximo histórico, es decir, el momento donde estaba más cara que nunca. Ahora bien, si armamos una sala de 10 inversionistas y les preguntamos sobre si estarían dispuestos a comprar en estos niveles de precio probablemente la mayoría de ellos dijeran que no. Es que es natural sentirse incómodo comprando un activo que luce gráficamente de esta forma, donde pareciera que el precio no puede subir más porque se agotaron los números en el eje gráfico. El sentimiento es como si el mismo gráfico le colocara un techo al activo. Lo que preferiría la mayoría sería esperar un buen retroceso en precio para intentar entrar.

ANTES…