¿Se acerca el fin de la Bolsa?

 | 16.02.2018 06:30

La turbulenta semana que han sobrellevado los mercados especialmente Wall Street después de sufrir con caídas la primera semana de febrero, logró equilibrarse en la última sesión con un cierre de 2.680,32 puntos. Tras el último comunicado del índice de precios de consumo subyacente mensual fue superado de acuerdo al mes anterior, alcanzando poco a poco el nivel inflacionario objetivo, acompañado por los datos de las ventas minoristas, desestabilizando los mercados, principalmente en este índice tocando mínimos de 2.626,60 puntos y por otro lado como reacción ante la fuerte caída prolongada después de varios minutos un repunte en el Oro tocando su máximo en 1.349,65 después de no haber visto señales de vida del metal precioso en varias semanas, fue un gran día para éste.

Los comportamientos anteriores han mantenido nerviosos al público inversor, causados principalmente tras el alza significativa de los rendimientos de Bonos del Tesoro, más sin embargo ante la perspectiva de aumentos en las tasas de interés de la FED este 2018, han provocado el desequilibrio entre las bolsas, como es el caso del EuroStoxx 50, tocando mínimos de 3.308,15 puntos tras la reacción negativa del mercado ante los últimos resultados de los índices de precios de consumidor de Estados Unidos, volviendo a recuperar aliento en 3.373,0 puntos.

Los indicadores macroeconómicos que divisan la estabilidad de la economía americana destacan el índice inflacionario acercándose a un 2% a largo plazo, observando este indicador de manera positiva se destaca que a corto plazo los precios se han solidificado a dicho objetivo, por otro lado, la tasa de paro estadounidense se ha mantenido sin ningún cambio, registrándose en 4,1% de acuerdo a su última revisión el 2 de febrero, más en cambio el salario mínimo ha aumentado mediante un ajuste en base a la inflación anual.

Ante estos escenarios, debemos comparar con los principales parámetros que dirigen el curso de los mercados, algunos son los indicadores de expectativas futuras sobre la situación económica que anteriormente hemos mencionado, y uno que cabría destacar es el sentimiento de mercado, bien la volatilidad, que medimos a través del índice Vix.