Mercado de divisas confundido y en lucha por encontrar un catalizador

 | 03.04.2018 08:22

El de este lunes fue un ejemplo destacado de la falta de contagio en los mercados de los movimientos de la renta variable. El indicador estadounidense S&P 500 llegó a caer ayer hasta un 4% y se acercó a la media móvil de 200 días, y sin embargo, las monedas apenas respondieron a este movimiento. Los cruces del yen japonés (JPY) sí que corrigieron en respuesta, pero siguen dentro de los rangos recientes y apenas imitan el grado de volatilidad de los mercados de valores. Asimismo, los diferenciales de riesgo en general se han ampliado en simpatía con el repunte de la volatilidad del mercado de acciones, pero aún estamos dentro del rango de medio plazo, aunque el foco está sobre el crédito o los diferenciales crediticios de los mercados emergentes. En resumen, las bolsas están corrigiendo, pero otras clases de activos simplemente observan con moderada preocupación, sin que haya indicios aún de desapalancamiento general.

Un factor que puede estar impidiendo una reacción más fuerte en los mercados de divisas es que las fuerzas compensatorias están actuando sobre el dólar estadounidense (USD), lo que dificulta crear una narrativa sobre qué hacer con la moneda. Por un lado, la aversión al riesgo tal vez da soporte al billete verde, ya que los operadores ampliaron las posiciones cortas especulativas del dólar, y generalmente se apoyan en la divisa estadounidense por su gran liquidez. Pero, por otro lado, la reducción de las expectativas de tasas de interés de la Fed facilita el enfoque en las preocupaciones de liquidez del dólar y erosiona la ventaja de carry del billete verde.

A partir de aquí, los operadores de bonos pueden sufrir la peor parte si los mercados de acciones se calman rápidamente y seguimos viendo datos bastante inflacionarios en los Estados Unidos. El dato del ISM manufacturero de ayer, una de las medidas de inflación más seguidas, alcanzó su nivel más alto en casi siete años. Pero el enfoque principal estará en el dato de las ganancias promedio por hora del mes de marzo que se publican este próximo viernes después de que los datos de febrero se hayan enfriado levemente. En general, una vuelta del apetito por el riesgo y rendimientos más altos pondrían al dólar (USD) y especialmente al yen (JPY) bajo presión a corto plazo nuevamente.

Gráfico del cruce dólar estadounidense-yen japonés (USD/JPY)

Pese al titular de "El peor comienzo del segundo trimestre desde la Gran Depresión", el par dólar estadounidense-yen japonés (USD/JPY) ni siquiera ha probado el 61,8% del retroceso de Fibonacci después del repunte de la semana pasada. En resumen, a pesar de tener las condiciones más ideales posibles para la apreciación de la divisa de Japón, ayer apenas respondió y lo hizo de una forma bastante débil. Si este nivel se mantiene intacto y no vemos un mayor contagio de la aversión al riesgo durante las próximas sesiones, los cruces del yen pueden estar en una consolidación significativa, con la acción en el cruce USD/JPY quizás un poco apagada en comparación con los cruces de beta más alta, como el dólar australiano-yen japonés (AUD/JPY), por ejemplo. Aún así, el par USD/JPY permanece en una tendencia bajista a menos que pueda retroceder por encima de al menos 107,50-108,50, si no 110,00.