Gráfico del día: Cómo operar en el mercado de bonos

 | 11.10.2018 09:01

Hay algo intrínsecamente malo en este mercado. En un mercado sano, las acciones y los bonos se mueven de forma inversa. Cuando las acciones suben, los bonos tienden a caer y viceversa.

La lógica es simple. Cuando los inversores buscan un crecimiento, están dispuestos a asumir riesgos con las acciones; cuando buscan seguridad, compran bonos. Sin embargo, recientemente, en lo que parece contradecir a todo sentido común, se ha producido una venta masiva de ambos tipos de activos.

Esto significa que los inversores se centran en el impacto de la subida de los costes de endeudamiento al subir los tipos de interés, lo que es negativo, en lugar de en el crecimiento de la economía, que es positivo. Este cambio de paradigma, en que las acciones y los bonos caen al unísono, deja los inversores expuestos, alterando las estrategias de diversificación que se supone que se implementan como cobertura ante las pérdidas en cualquier mercado.

Así, los inversores pueden desarrollar sus posiciones, vendiendo los dos tipos de activos. Por otra parte, las previsiones de más subidas de los tipos de interés restan atractivo al actual rendimiento a largo plazo de los bonos. Una buena manera de beneficiarse de este extraño rumbo del mercado es con los bonos iPath del Tesoro a 10 años (NASDAQ: DTYS).