Cómo aprovechar los ciclos economicos de los mercados

 | 29.06.2016 05:19

Por Daniela Wechselblatt, CFA.

Como bien sabemos, existen ciclos económicos. Principalmente diferenciamos la etapa de expansión y auge de la etapa recesiva. Pero lo interesante de este análisis es saber donde están invirtiendo los demás participantes del mercado, reconocer en qué etapa del ciclo estamos y ajustar nuestras inversiones para poder sacar el mayor provecho de ellos.

Para ello es fundamental poder diferenciar entre compañías cíclicas y anticíclicas. ¿A qué refieren estos conceptos? Se trata de la correlación que presenta el precio de una compañía con las fluctuaciones del mercado. Veámoslo con más detalle.

Los sectores cíclicos son aquellos en los que las ganancias de las empresas son altamente dependientes de la etapa del ciclo económico en la que la economía se encuentre. Los productos suelen ser costosos y no son de primera necesidad. En caso de que la economía transite por una crisis, su consumo se puede posponer hasta que la situación mejore. Estas compañías suelen tener elevados costos fijos. En época de expansión, la capacidad utilizada aumenta mientras que los costos se mantienen, generando un incremento en las ganancias. Ejemplos de estas industrias son automotrices, construcción, tecnología, entretenimiento y consumo discrecional en general.

Los sectores anticíclicos están conformados por compañías que producen bienes y servicios con una demanda relativamente estable. Principalmente nos referimos a las industrias de consumo no discrecional (Ej.: alimentos, supermercados), salud, servicios públicos (Ej.: gas, agua, electricidad) y telecomunicaciones. Estas compañías suelen ser llamadas también defensivas, ya que al tratarse de bienes o servicios de primera necesidad, por lo general van a reportar ganancias independientemente de la fase del ciclo económico por la que se esté atravesando. Son las empresas a las que nos inclinaremos en momentos de recesión económica.

A continuación, podemos ver el gráfico de la performance del futuro del oro (línea violeta) y el ETF del clásico índice tecnológico Nasdaq (velas rojas y verdes). El primero de ellos, instrumento anticíclico por excelencia, y el Nasdaq, que califica como un sector cíclico.