Bolsa de EEUU: Por esto se van a fundir los millennials

 | 28.09.2020 07:25

La próxima caída de la bolsa de EE.UU. va a fundir a toda una generación: los millennials. 

Creen que para ganar dinero en la bolsa solo hay que comprar cualquier cosa: piensan que las acciones solo van hacia arriba. Pero los millennials están haciendo apuestas cada vez más agresivas con los llamados ETFs apalancados. De esto vamos a hablar hoy.

Para los que no lo saben, un Exchange Traded Fund, o ETF, es un fondo de inversión que cotiza en la bolsa igual que lo hace una acción (su cotización varía segundo a segundo).

Estos fondos buscan replicar el rendimiento de un índice, un commodity, la bolsa de un país, o un sector de la economía. 

Para que lo entiendan mejor, les doy algunos ejemplos:

  • El ETF QQQ replica al índice Nasdaq 100.
  • El ETF GLD sigue al precio del oro.
  • El ETF EWZ replica el rendimiento de la bolsa de Brasil.
  • El ETF SH replica de manera inversa el índice S&P500 (es decir, si el S&P500 baja un 1%, el ETF SH sube un 1%). A estos ETF se los llama inversos, porque se mueven en dirección opuesta al índice que siguen.

¿Y qué son los ETFs apalancados?

Son ETFs especiales que buscan multiplicar los retornos diarios del índice que siguen. 

Vamos con dos ejemplos:

  • El ETF TQQQ busca multiplicar por tres (3X) los retornos diarios del Nasdaq.
  • El ETF SQQQ hace lo mismo que el anterior pero de manera inversa (-3X)

Es decir, si el Nasdaq 100 sube 1%, el ETF TQQQ subirá +3% y el SQQQ caerá -3%.

Con esta introducción ya podrán intuir lo que está pasando. Con la premisa de que “la bolsa sólo puede ir para arriba” (como piensan los millennials), un ETF apalancado que multiplica por tres el retorno del índice parece un camino tres veces más rápido para hacerse rico. Pero les tengo malas noticias. Invertir en ETFs apalancados es una pésima idea y les explico por qué con tres razones.

  1. Pueden fallar.

En primer lugar, lo que tienen que preguntarse es cómo hace el ETF para conseguir resultados apalancados. Acá podemos ver lo que tiene adentro un ETF apalancado:

Una caja de pandora.

Para conseguir retornos que multipliquen el retorno del benchmark, estos fondos tienen que armar una compleja estructura con productos derivados (opciones, swaps, futuros) que les permitan de manera sintética conseguir esos resultados.

Es decir, puede suceder que el índice se mueva de una forma y que el ETF no pueda obtener el movimiento esperado porque la estrategia de derivados utilizada podría no funcionar (básicamente si una contraparte no puede cumplir)

  1. La matemática es cruel.

Los ETF apalancados multiplican los retornos diarios de un determinado índice. El problema es que la gente no entiende lo que esto significa.

Precisamente, multiplicar retornos diarios hace que a lo largo del tiempo los retornos del índice y los del ETF sean muy distintos.

Cuanto más tiempo se mantenga un ETF apalancado y mayor sea la volatilidad del índice, más van a variar los retornos entre uno y otro.

Acá un ejemplo ilustrativo:

Desde el 19 de febrero hasta el 25 de septiembre el Nasdaq 100 subió un +14,7%. La gente ve esto y piensa que si hubiera tenido un ETF apalancado x3 hubieran ganado +44,1%. Pero esto no es necesariamente así.

¿Cómo le fue al ETF TQQQ (Nasdaq 100 3X) en ese periodo? Tuvo un retorno de -3,7%.

Veamos otro ejemplo. En las siguientes tablas les muestro un ejemplo hipotético. Para que sea más fácil la comparación suponemos que tanto el índice como el ETF apalancado 3X arrancan el día 0 ambos con un valor de 100.

Tabla 1: