El apetito por el riesgo sigue luchando, pues la propagación del coronavirus todavía no está bajo control en la mayor parte del mundo y las tensiones geopolíticas entre China y Occidente se intensifican. La decisión de Australia de suspender el tratado de extradición con Hong Kong en respuesta a su nueva ley de seguridad muestra que Estados Unidos podría tener apoyo internacional en este tema con China.
En Estados Unidos, la actividad económica requerirá de una reapertura exitosa de las escuelas en otoño y eso puede depender de un cambio importante en el uso obligatorio de las mascarillas. La propagación del virus no se está estancando, ya que muchos estados (Texas y Florida) todavía están viendo aumentos significativos en las hospitalizaciones.
Los futuros de S&P son ligeramente más altos, mientras que el Nasdaq continúa beneficiándose de la fuerte demanda de acciones tecnológicas de mega capitalización. El dólar es menos presionado y se sitúa cerca de algunos niveles críticos.
Subsidios por desempleo
El informe semanal de solicitudes de subsidios por desempleo mostró que todo se dirige en la dirección correcta, pero la situación aún es sombría. Las solicitudes iniciales de subsidio por desempleo cayeron a 1.31 millones, por debajo de la estimación de consenso de 1.37 millones, pero aún así es la semana número 16 en la que el índices registra niveles superiores al millón. Los reclamos continuos disminuyeron, pero todavía están en un nivel deslumbrante de 18 millones. La reciente ola de nuevos casos de coronavirus todavía no está afectando el mercado laboral y muchos inversores están dando un suspiro de alivio temporal.
Biden
Las acciones estadounidenses no han valorado significativamente el riesgo derivado de las elecciones presidenciales en EE.UU., pero eso cambiará pronto. A lo largo de la crisis desatada por el COVID-19, el presidente Trump vio que aquel camino fácil a su reelección se esfumó por completo. El ex vicepresidente Biden ha celebrado el drástico giro a su favor en varias encuestas y ahora tiene más posibilidades, ya que el Senado parece que podría estar en juego. Muchos observadores políticos prestarán mucha atención a cualquier detalle con su nueva política económica en su discurso en Dunmore, Pennsylvania hoy.
El período de luna de miel de Biden para ganar la nominación demócrata ha terminado y el escrutinio de sus políticas comenzará ahora. El plan económico de Biden busca revertir algunas de las políticas del presidente Trump, pero no parece demasiado radical. Mejorar las opciones de atención médica pública y aumentar los impuestos corporativos y patrimoniales podría pesar el apetito de riesgo en las próximas semanas. También busca cumplir con un salario mínimo federal de $15 por hora, licencia familiar pagada de 12 semanas, preescolar de niños universal y plataformas de pago respaldadas por la Fed para estadounidenses de bajos ingresos. Biden apunta a una plataforma de centro moderado que intentará atraer el voto progresivo. Es probable que Biden tenga dificultades para convencer a la opinión del público de que a la economía de Estados Unidos le irá mejor en el comercio, pero eso podría no importar, ya que lidera con una plataforma económica moderada.
Petróleo
Los precios del petróleo permanecen anclados justo por debajo del nivel de $41 por barril, después de que las solicitudes semanales de seguro por desempleo en Estados Unidos sugieren que la recuperación económica permanece intacta y que la demanda de crudo debería mejorar a pesar de los enormes aumentos de producción diaria en algunos de los estados más poblados. El crudo WTI sigue estancado a pesar del repunte más amplio del mercado. Muchos operadores en el sector de energía podrían ser cada vez más cautelosos con la perspectiva de la demanda luego de que el informe de inventario de petróleo EIA de ayer mostró que las exportaciones cayeron 1 millón de barriles, sus niveles más bajos desde noviembre del 2019. El petróleo parece estar listo para un retroceso aquí y si la perspectiva de la demanda muestra más signos de vacilación, el WTI podría asentarse a $30 por barril.
Oro
Los precios del oro son ligeramente más bajos desde el nivel más alto desde 2011, ya que la propagación del coronavirus continúa devastando algunos de los estados más poblados de los Estados Unidos y los comerciantes de oro están viendo un poco de agotamiento después de superar el nivel de $1800, pero nadie parece ansioso por abandonar este comercio todavía. El constante repunte del mercado laboral sugiere que el reciente aumento en nuevos casos no ha interrumpido la recuperación económica. Sin embargo, los empleos estadounidenses aún no regresan lo suficientemente rápido y aumentan el llamado a una respuesta fiscal sólida que mantenga el estímulo del oro.