Bueno, quizá he exagerado un poco. La mejor, no lo sé. Pero sí es cierto que ha sido una buena estrategia de trading para haberla aplicado en este 2018. Ya le hablé de ella en el artículo, somos lo que compramos y cuando lo compramos. Si usted compró al cierre de cada sesión el índice S&P500 y lo vendió en la apertura del día siguiente, usted habría ganado un 13%. Déjeme que le cuente.
Si usted compró al cierre de cada sesión el índice S&P500 y lo vendió en la apertura del día siguiente, usted habría ganado un 13%
Es verdad que esta estrategia suena un poco surrealista. ¿Cómo voy a comprar algo y dejar que el mercado cierre exponiéndome al riesgo de no poder cerrar mis posiciones cuando yo quiera? Pues bien, esta estrategia ha superado al mercado en un 20%.
Bespoke ha hecho un estudio de la técnica, de la que ya hablamos aquí, y si hubiera hecho esto: Comprar antes de que el mercado cerrara para vender su posición justo al día siguiente al abrir el mercado, la rentabilidad que habría obtenido sería del 13.3%.
Para entender lo que ha pasado este año en el mercado podemos analizar lo que hubiera pasado justo realizando la operación contraria. En vez de intentar obtener la rentabilidad del mercado fuera de su horario regular, comprando el índice S&P500 justo en el momento de abrir su sesión y cerrándolo justo al final de la misma. Es decir, lo que hacen muchos inversores minoritarios. La rentabilidad habría sido de un -20.4%. O lo que es lo mismo, la rentabilidad de su cartera habría perdido una quinta parte de su valor. Palabras mayores.
En vez de intentar obtener la rentabilidad del mercado fuera de su horario regular, comprando el índice S&P500 justo en el momento de abrir su sesión y cerrándolo justo al final de la misma. Es decir, lo que hacen muchos inversores minoritarios. La rentabilidad habría sido de un -20.4%.
Viendo esta situación, la diferencia entre la rentabilidad de las dos carteras, podemos entender algo. Hemos vivido en el 2018, un mercado eminentemente bajista en intradía, es decir, el mercado ha caído mientras ha estado abierto.
¿Es una buena estrategia de trading? No podemos saberlo. Por una parte, es cierto que la rentabilidad que ha mostrado es interesante, pero no hay un hecho que la respalde o fundamente. Si no entendemos por qué funciona algo, es difícil dejar saber cuando deja de funcionar, por lo que este tipo de sistemas tienen un peligro evidente. Puede que cuando quiera darse cuenta de esto ya sea demasiado tarde. Este tipo de sistemas son comunes entre quienes hacen trading como sistemas automatizados. Un sistema que no tiene por qué tener unos parámetros que lo hagan funcionar y que sean comprensibles desde un punto de vista fundamental. Puede que el sistema funcione con una serie de indicadores técnicos que le indiquen cuando comprar o vender , y aunque usted no vea más que una serie de causalidades que se cruzan y sin una aparente lógica detrás puede que le vayan indicando el camino a seguir en los mercados financieros, y obteniendo una rentabilidad real en su cartera. Por lo que no entender cómo funciona algo no quiere decir que no vaya a ser rentable. Por lo que no siempre es un criterio a seguir, como le decía en este primer “pero” ante este sistema que hoy le muestro. Una forma de limitar el riesgo, normalmente, en este tipo de sistemas es analizar cuál ha sido la pérdida máxima del mismo y ajustar el riesgo en función de esta pérdida, llamada Máximo Draw Down. Si el sistema, una vez puesto en marcha, vuelve a llegar a este Máximo Draw Down hay varias formas de actuar. Podemos cerrar el sistema y todas las posiciones, disminuir la posición o dejar que siga en pérdidas pero sabiendo cuándo cerrarlo (Algo que deberíamos haber decidido antes de ponerlo en marcha e iniciar la operativa con el), por ejemplo, al llegar a 2 veces el Máximo Draw Down, o 1.5. Niveles aleatorios, que aunque no nos hagan comprender por qué un sistema ha dejado de funcionar, sí nos ayudan a controlar el riesgo.
¿Es una buena estrategia de trading? No podemos saberlo. Por una parte, es cierto que la rentabilidad que ha mostrado es interesante, pero no hay un hecho que la respalde o fundamente
Por otra parte, otro obstáculo que tenemos al elegir un sistema del cuál sabemos poco más que unos resultados, sin más datos, son las comisiones y el deslizamiento. Las comisiones, el coste que nos impone el broker por cada compra o venta siempre repercuten en nuestros resultados. Imagínese que usted al operar en divisas busca un objetivo de 10 pips, o puntos en un par. Pero su comisión es de 3 pips o puntos. ¿Cuál será la repercusión de la comisión en sus resultados? Ni más ni menos que de un 30%. Sin embargo, si su objetivo fuera en vez de 10 pips de 100. El impacto sería de un 3%. Es por esto, que cuanto mayor sea nuestro horizonte temporal menor será el impacto de estas sobre nuestra cartera.
Por otra parte, otro obstáculo que tenemos al elegir un sistema del cuál sabemos poco más que unos resultados, sin más datos, son las comisiones y el deslizamiento
En cuanto al deslizamiento también es algo a tener en cuenta en un sistema. De esto se hablará en otro artículo.